No se por qué estoy aquí... ¡¡¡pero aquí estoy!!!

Wednesday, February 25, 2009

Como naciste, creciste y te hiciste violento III


Los ochentas fueron el boom del hooliganismo en todo sentido. Las firms competían entre si por ser las más violentas y las mejores en hacer lo que hacían: grandes vergueos. Los personajes adquirieron fama de celebridades en sus barrios. Se implantó una moda y luego la tragedia de Heysel les dio notoriedad internacional. Todo esto despertó la mirada de los políticos y las fuerzas del orden. Durante la administración Thatcher los métodos para lidiar con dicho fenómeno fueron desastrozos y no lograron frenarlo sino al contrario nutrirlo más. Pero hubieron otros que tomaron nota del hooliganismo y también hicieron de las suyas: el crimen organizado y los partidos políticos de extrema derecha.

En los años setentas se asoció a los hooligans (al igual que a los punks y a los skinheads) con el racismo y vandalismo. No voy a negar que no existía ninguna relación pero estas eran la excepción y no la norma. Debido a la inmigración, muchos de los integrantes de las firms (particularmente al norte de Inglaterra) tenían un sentimiento anti-migrante pero las firms en si no eran grupos racistas. Es más, los integrantes de muchas eran de raza negra (el caso más famoso es el de Cass Pennant de la ICF de West Ham United de quien incluso acaba de salir una película que comentaré luego) y de los Birmingham City Zulus que tenían este nombre por el alto número de hooligans negros en sus filas. Sin embargo, los medios de comunicación la cagaron a lo grande al darles una reputación de racistas y a crear una imagen distorsionada de sus actividades (es por esto que el hooligan tradicional odia a los medios). Debo aclarar que los hooligans nunca se vieron como criminales ni vándalos, para ellos sus actividades violentas se limitaban a las peleas con rivales hooligans y la destrucción de inmuebles era dirigida a los pubs en donde los rivales se reunían.


Lo que más llamó la atención de el crimen organizado y los partidos políticos era la capacidad de convocatoria de las firms. Fácilmente podían reunir a cientos de personas listas para partirse la cabeza y peor aún por algo tan trivial como el futbol. Para cuando muchos de los grandes personajes de los setentas y ochentas empezaron no tanto a aburrirse de sus actividades sino también a darse cuenta que su modo de vida no los llevaba a ningún lugar económicamente, mucho se rinden a la tentación del dinero fácil. Varios pasan a trabajar como porteros de clubs nocturnos operados por mafiosos y a convertirse en los guardespaldas de estos. Eran los encargados de hacer "el trabajo sucio" de sus jefes y se involucraron en narcotráfico, trata de blancas, extorsión y muchos se llegaron a autodenominar en su oficio como "recolectores de deudas" (¿Y si no te pago qué? no era la frase que se le decía a un tipo curtido en una firm).

Por otro lado aparecieron los grupos de extrema derecha que encontraron en los graderíos y en los hooligans el recurso humano necesario para agenciarse poder político. Partidos como la British National Party (el Partido Nacional Británico) y la National Front (el Frente Nacional) iniciaron fuertes tareas para reclutar seguidores pertenecientes a las firms alrededor de Inglaterra. Pero también se les unieron movimientos más extremos como el grupo neo-nazi Blood and Honour (Sangre y honor) que reclutaron varios jóvenes de las firms para ser parte de sus fuerzas de choque en particular la notoria y violenta Combat 18 (Combate 18 - el 18 es un número común de grupo neo-nazis por representar las siglas de Adolfo Hitler A-1 y H-8). Muchos de estos grupos realizaron actividades violentas contra las comunidades asiáticas, caribeñas, judía y gay en el Reino Unido.

Aquí es necesario señalar la gran diferencia que se dio entre el hooliganismo de los 70´s y principio de los 80´s con el de finales de esta década o mejor dicho los hooligans después de la tragedia de Heysel del 85. Los primeros tenían muy firme su concepto de pelear por los colores de su equipo. Sí, a huevos que eran violentos y armaban grandes vergueos pero eran reacios a participar en actividades claramente ilegales. Los segundos en cambio se les fue el ego a las nubes, cada vez querían más, ya no se conformaban con ir a darse verga el fin de semana. Les gusto "la vida loca" de los gangsters: las mujeres, las drogas, "el respeto" y a otros les emociono ser parte de un grupo político dispuesto a cambiar el país, de refundar Inglaterra. Aquí se da una parte del fin de los terrace casuals (los casuales de los graderíos, el hooligan de los años ochentas).


Después de la tragedia de Hillsborough se creo el Football Spectators Act (el Acta o Ley de Espectadores de Futbol) el mismo mes de la tragedia, abril de 1989. Gracias a dicha ley los hooligans fueron clasificados como aficionados tipo C o bajo el capítulo C. Las actividades de hooliganismo fueron catalogadas como delictivas. Scotland Yard creó una oficina para investigar dichos actos. Sin embargo, con la asociación de muchos hooligans al crimen organizado y a grupos extremistas, entonces las actividades delictivas podían ser catalogadas como actividades criminales por asociación. Scotland Yard se puso las pilas y durante los noventas inició una fuerte investigación contr el hooliganismo. Muchos agentes fueron infiltrados en los firms. estos agentes eran verdaderos aficionados de los equipos, conocían las canciones, los barrios, la historia de sus equipos, muchos se tatuaron, se vestían, hablaban y se comportaban como hooligans. Se empezaron a dar arrestos y muchas firms empezaron a verse afectadas por estos.

Pero hubo otro fenómeno que resquebrajó la organización de las firms y ese fue la escena Rave. La música electrónica se puso de moda, las fiestas que duraban ya no solo noches sino días eran la mera chingadera de aquel entonces. Se abren las mega discotecas: Ministry of Sound, Cream, Gatecrasher. Los principales destinos turísiticos eran Ibiza y Ayia Napa. Todos querían ir a estas fiestas y el medio para aguantar horas de horas, por no decir días, por no decir semanas era con una pequeña pastillita llamada éxtasis. El éxtasis o "e" se convirtió en uno de los principales productos de exportación de Holanda en los noventas. Una pastilla le daba a uno suficiente energía para bailar a lo loco por seis horas, solo se necesitaba de suficiente agua y claro mucho techno, mucho dance y de ahí drum n´bass, jungle, garage, trip-hop y todas sus formas musicales de los últimos 20 años. ¿Y esto a que putas viene? Sencillo mano, muy sencillo. ¿Quién iba a estar listo o dispuesto a irse a volar pija un fin de semana cuando tiene dos o tres pastillas de extásis encima? Las firms envejecen y dejan de nutrirse de jóvenes.


Es así como primero, sus líderes envejecen y se van a prisión por asociación para con actividades criminales; y segundo, no hay sangre nueva para nutrir a los firms. Dos casos notorios son el de la ICF de West Ham que básicamente deja de ser lo que es y prácticamente desaparece o al menos pierde su reputación como una de las más temidas firms de toda Gran Bretaña. El segundo caso, que conozco personalmente, es el de los Chelsea Headhunters. Que después del arresto de sus dos líderes: Andrew Frain en el 98 y luego Jason Marriner en el 2000, desaparecieron. Estos dos líderes hooligans a quienes el solo hecho de conocer a miembros de Combat 18 les costó 7 y 6 años en el calamako respectivamente. Las operaciones de infiltrados departe de Scotland Yard llegaron atener tanto éxito que muchos criminales, grupos extremistas y firms de hooligans desaparecieron. Fue tal el éxito que hasta la fecha se cree que Combat 18 fue un grupo inventado por Scotland Yard para desmantelar a los grupos extremistas violentos del Reino Unido.

Para muchos fue el final de el hooliganismo en Inglaterra pero lamentablemente cantaron victoria antes de tiempo.

Fotos: El bepi practicando para ser un hooligan macho; Bandera conmemorativa del ICF del West Ham United; el logo de Combat 18, la calavera con huesos cruzados es casi identica a la que simboliza a los Chelsea Headhunters; tristemente los vergazos aún siguen. Gugul y otros lares.


PD: A la próxima tal vez termino, falta la actualidad hooligan, su comercialización y su internacionalización.

Monday, February 23, 2009

Como naciste, creciste y te hiciste violento II


Para principios de los setentas los hooligans aún no eran vistos como una amenaza or parte de la polícia. Históricamente se habían dado pleitos entre grupos de aficionados. Sin embargo, las hooligans sabían muy bien a que iban al estadio y no era precisamente a apoyar a su equipo. No existen datos estadísticos sobre arrestos por conducta violenta relacionada a los aficionados de futbol de ese entonces, pero muchos de los que estuvieron ahí cuentan anecdotas de verdaderas batallas campales. Para mediados de los setentas con la apertura de las fronteras del país a la mano de obra proveniente de Asia y el Caribe y la inmigración a gran escala es cuando el hooliganismo empieza a tomar una nueva forma. Muchos de los obreros quedan desempleados y van de trabajo en trabajo pero empiezan a dedicarle más tiempo a su bar local y a la organización de aficionados violentos para enfrentar a otros. Así empiezan a surgir las personalidades. Los líderes de los diferentes grupos de hooligans eran aquellos que tenían capacidad de convocatoria, podían reclutar jóvenes a su grupo y tenían un carácter extremadamente violento a la hora de las peleas. Junto con los líderes se inician a formar las primeras "firms" o grupos organizados de hooligans. Estos adoptan su nombre de acuerdo al apodo del equipo que representan, sus colores, el apodo que otros les dan, su barrio, etc.

Los puntos de reunión para un partido eran los pubs o bares que quedaban a una distancia corta del estadio. Estos bares pasaron a convertirse en los cuarteles en donde se organizaban viajes a otros estadios, estrategias de pelea contra otros grupos de hooligans y actos de vandalismo en contra de otros bares o centros de reunión de hooligans rivales. La composición social seguía siendo la misma: clase obrera activa o en paro. La brutalidad de las peleas empieza a llamar la atención de los medios escritos. Ya en los barrios todos sabían quienes eran hooligans y quienes eran sus líderes. Sin embargo los medios erróneamente asocian a los hooligans a otros subgrupos como los skinheads y los punks. A todos los dotan con una reputación exageradamente negativa, sin realmente comprender sus orígenes y procurar explicar sus acciones. A todos se les atribuye un estatus criminal, racista, vandálico y violento. Esta exposición a los medios también empieza a llamar la atención de los políticos. Los setentas se caracterizan por las grandes batallas campales previo, durante o después de un partido y siempre dentro o a inmediaciones del estadio. Los hooligans en su mayoría se caracterizaban por llevar la bufanda de su equipo.



Para los ochentas el panorama nuevamente cambia. Muchos de los jóvenes que crecieron viendo a las personalidades hooligans y observando a la distancia las batallas campales pasan a formar parte de las filas de las firms. La crisis económica se agudiza en Inglaterra y para más fregar se viene la guerra de las malvinas lo que divide y separa a muchas familias. Muchos jóvenes crecen sin una figura de autoridad, ya sea el padre o la madre y el que queda debía trabajar todo el puto día. Sin un guía para enfrentar las vicisitudes de la vida, estos jóvenes pasan a engrosar las filas de las firms. En ellas adquieren un identidad con los colores de su equipo, su barrio, sus amigos (los otros hooligans) se convierten en su familia. Las cosas cambian, en los setentas muchos hooligans encontraban un desahogo a las presiones diarias, para los ochentas el hooliganismo se convierte en un modus vivendi. Surge la época de los casuals.

El término hooligan, siempre ha sido rechazado por ellos. Ellos se consideran football fans, aficionados de futbol. Los casuals cambian todos los conceptos clásicos que se tenían del hooligan tradicional. El nombre viene de la vestimenta que usan, surge una moda de aspecto casual y de ahí surge el nombre. A principios de los ochentas bajo el gobierno de Maggie Thatcher (nefasto en este aspecto social por cierto) el hooliganismo acapara la atención de muchos políticos y de la policía. Se inician redadas y registros de individuos que llevasen los colores de su equipo, ya sea una camisola o una bufanda. Para evitar esto, los hooligans cambian su vestimenta y se empiezan a imponer las "modas de los graderíos". Playeras Lacoste, chumpas Burberry y zapatos timberland y tenis ellese, fred perry y Le Coq Sportiff. Los hooligans estrenaban ropa los días de los partidos. Vestían sus mejores galas para ir a darse de trompadas. Pero otra cosa cambia, el objetivo de las peleas ya no era solo porque si, ahora las diferentes firms se peleaban entre si para tener la reputación de "los más malos de Inglaterra".



Fue en 1985 cuando el hooliganismo alcanzó una notoriedad mundial con la tragedia en el estadio de Heysel en Bélgica para la final de la Copa de Campiones entre el Liverpool inglés y la Juventus italiana. 39 aficionados de la Juve murieron aplastados cuando los aficionados del Liverpool botaron una maya divisioria y atacaron a los italianos que no eran ni siquiera ultras sino simples aficionados. La vergüenza para Inglaterra fue tal que el hooliganismo pasó a ser llamado en aquel país como "la enfermedad inglesa". En vez de tener un efecto negativo, la tragedia de Heysel, fue el combustible que muchas firms usaron para ser más violentos y agresivos. El gobierno de Thatcher tampoco ayudo en ni mierda, inició un trato represivo y violento contra cualquier aficionado de futbol en los estadios, provocando que muchos de estos se tornaran violentos. Si bien es algo muy debatible y polémico pero en el despepute consideramos que "las medidas de seguridad" implementadas bajo las ordenes del ejecutivo fueron las responsables de la tragedia de Hillsborough de 1989 en donde 96 aficionados murieron aplastados.


Los hooligan casuals competían entre si por ser el grupo más violento, los más malos. Sus líderes adquirieron un estatus de celebridades locales. Cada firm o grupo era prácticamente una institución dentro de los equipos. De los más notorios estaban La Inter City Firm de West Ham; los Headhunters de Chelsea; los Bushwackers y F-Troop de Millwall; los Zulus de Birmingham City; la Leeds Service Crew de Leeds United; los Country Road Cutters de Everton; los Guvnors de Manchester City; la Red Army del Manchester United; los Urchins del Liverpool; la 6.57 Crew de Portsmouth y la Blades Business Crew de Sheffield United, entre otros. Cada una de estas era de cuidado, un grupo de jóvenes liderados por verdaderos locos violentos. Lo que las autoridades no lograron notar durante los ochentas es que las firms ya no operaban exclusivamente dentro de los estadios, ni siquiera en sus alrededores sino que en puntos específicos acordados por sus líderes. Así es, estos se conocían los unos a los otros, tenían los telefonos de sus hogares y literalmente programaban encontronazos en puntos específicos mientras la policía estaba preocupada por los aficionados de los estadios. La segunda mitad de los ochentas fue una de las más violentas en cuanto a la actividad hooligan en Inglaterra pues la violencia paso a ser la vida y el trabajo de muchos de los miembros de las firms.

Fotos: Otros papis orgullosos de su hijito hooligan del Chelsea; Hooligans a la salida de la estación metropolitana y de trenes de Victoria al Sur-Centro de Londres; Foto de la policía metropolitana de identificación de hooligans; insignia clásica de los Chelsea Headhunters. De gugul y de poraí ;)


PD: Seguimos con la escena Rave de los noventas, las nuevas modas y la comercialización e internacionalización del hooligan.


Saturday, February 21, 2009

la anti-sociedad de los graderíos (o como naciste, creciste y te hiciste violento I)


Hablando con un ese maese hace poco, le decía como es que me intriga el asunto este de la violencia irracional. O sea, esa mara que es violenta in extremis porque si y nada más, sin explicaciones y sin disculpas... que vivan los vergazos. Pues bueno, mi formación (si es que así se puede llamar a semejante despepute) no es en sociología, ni en psicología, tampoco estudié periodismo, solamente leo un tatapuscal de diarios de aKí y de aLLá. La cosa es que he llegado a la conclusión de que para comprender ciertos fenómenos de comportamiento social hay que ir al fondo del asunto. Hay que ir y ponerse en los zapatos de los protagonistas. Estoy convencido que solo así se puede realmente comprender aunque sea un poco, las acciones de los otros. De estos fenómenos uno que siempre me ha intrigado ha sido la violencia en el futbol, esa que nació en los graderíos pero que hoy se desarrolla lejos de ellos pero continua siendo uno de los fenómenos sociales más complejos de comprender: los hooligans.

Seamos claros, al estadio la mayoría vamos a putear. Si, alentamos a los nuestros también, pero por lo general vamos a putear. Muchos papis llevan a sus hijos y les permiten proferir todo tipo de insultos, pues eso es lo que se hace en las plateas, tribunas, curvas, generales y hasta en los palcos: puteás al árbitro, al equipo contrario, a la afición contraria, a los tuyos cuando juegan mal. Es casi como un rito de pasaje. Así te volvés machito. Que orgulloso se ha sentir el papi del canchito de la primera foto que ha dado la vuelta al mundo: así es mijo, seguramente está puteando a un rival del tan odiado Ajax de Amsterdam (el máximo rival del Feyenoord, cuya camiseta y colores lleva el nene). El tema no es para tratarlo así light, pues hasta objeto de estudio de posgrado es. En mi vieja alma mater existe una maestría que se ocupa de este tema incluso. Pero aquí en el despepute, le hacemos huevos al asunto y saltamos no de clavado sino de panzaso a la intolerante, maloliente y asquerosa fosa de la violencia organizada en el futbol: una breve y despeputada historia de los hooligans.


En Wikipedia podes encontrar las definiciones de hooligan y una historia contada al pedo. O sea, desde lejos, desde la seguridad de un cuartito y una PC o laptop: el diccionario, las noticias y lo que el pajerazo de tu carnal te ha contado, lo elevas todo al cuadrado y voilá tenés tu historia o wikiartículo. O al menos eso te gustaría creer. Pero no, la verdad la palabra hooligan es lo que menos importa. Esta se puede traducir como vándalo, gamberro e incluso marero, o sea, un anti-social. Pero Hooligan fue realmente el mote con el cual las abuelitas inglesas de hace cincuenta años le dieron a los ruidosos, vulgares y embriagados aficionados de futbol de los años sesenta, que es cuando se acuña la palabra a los aficionados de futbol. Es en la Inglaterra de los años sesentas del siglo pasado que aparece hooligan como un aficionado violento de futbol. Los hooligans en ese entonces eran realmente los ultras de hoy día. Tipos fieles a su equipo que lo seguían a todos lados con el objetivo de apoyarlo en las buenas y en las malas. Claro como cualquier otro ultra vos y los tuyos iban al bar, se tomaban unas cervezas, y luego iban al estadio. Perder no es algo agradable pero es peor perder y que encima los rivales te insulten y te hagan burla, eso colma la paciencia de cualquiera y peor cuando hay unas cervezas de por medio y así se iniciaban las riñas. En los graderíos, a la salida del estadio, en las estaciones de trenes o buses, etc. El problema era fácil de descifrar: grandes multitudes + una rivalidad + cerveza = posibles problemas. Y digo posibles porque realemnte no era cosa de otro mundo, por lo menos así fue durante los años sesentas, habían vergazos, pero no llegaban al rango de despepute grueso.

Pero la cosa cambio radicalmente para los setentas. Para comprender como la violencia del futbol se fue desarrollando es necesario entender y conocer el contexto social de la época. El final de los sesentas y principio de los setentas en Inglaterra fueron marcados por "Los Problemas" que se dieron con la situación de Irlanda del Norte. La discusión política sobre el estatus constitucional de Irlanda del Norte degeneró en una ola de violencia política, étnica y religiosa que afectó a las Islas Británicas. Grupos como el Ejercito Republicano Irlandés y paramilitares como la Fuerza de Voluntarios del Ulster causaron terror entre los pobladores de Belfast, que luego se extendió por toda Irlanda, luego Inglaterra y eventualmente Escocia y Gales también se vieron afectados. A principios de los setentas también se vino la crisis del petróleo lo que afectó severamente la política energética del Reino Unido cuyos gobernantes decidieron reactivar la explotación y productividad minera a gran escala, esa misma que ayudo a Inglaterra a convertirse en un Imperio pero a un precio humano que influyó en los trabajos, entre otros , de Federico Engels quien a su vez influyó en Marx.

Tiempo, ojo, pelo... te estás yendo por las ramas, a que putas viene todo esto con el futbol y los hooligans. ¿¿¿¿¿?????


Ok, perdón (sí a veces me pelo, pero es la emoción). La respuesta es fácil. Durante los setentas la clase obrera inglesa, los trabajadores de cuello azul, o el proletariado si desean ya que estamos en esas, tenían dos opciones claras y seguras de trabajo. Unirse a la fuerzas armadas e ir a patrullar las calles de Belfast y alrededores o regresar a trabajar en las minas. Dos trabajos de mucho estrés. Entonces que les quedaba de diversión o distracción para estos tipos. El futbol de los fines de semana. Entonces, vos que te partías el lomo en la mina de lunes a viernes por doce horas o que hacías dos rondas de tres horas en algún callejón de Belfast, Newtownabbey, Portadown u Omagh cruzando dedos que no cuadraras en la mira de un francotirador, que no explotará una bomba o que no te caiga un coctel molotov; descansabas o te desahogabas con el futbol. Pero qué carajos. Después de tanto estrés, tanta ansiedad, tenés que ir al estadio a ver a tu equipo jugar mal, a oir los insultos de la oposición, las burlas, las risas. No señor, esta era la gota que derramaba el vaso y depende solamente de uno y de los suyos vengarse de los que nos insultan y esa venganza se hace a golpes y patadas. No es de sorprenderse que los primeros grupos de aficionados violentos organizados en los años setentas estaban compuestos por mineros, reservistas y trabajadores de puertos.
(La influencia social era tal en aquel entonces que de aquí se desprende el estilo de futbol actual inglés. Es el estilo del sacrificio y la verticalidad a ultranza. Al igual que la clase obrera, el futbolista debía cumplir con su trabajo sin quererse lucir, debía cumplir con lo suyo, ir siempre al frente y pelear cada balón como si fuese el último y nunca quejarse. Esto es lo que el aficionado inglés exige, incluso hasta hoy día. Nada de malabarismos, solo ir al frente con muchos huevos.)

Las circunstancias de esta época llevaron a que cada fin de semana, los aficionados de oficio en las minas, en los puertos, en las alcantarillas, en la construcción, en el manejo de deschos, etc. se reunieran en sus bares locales, todos a compartir y llorar sus penas y luego a esperar celebrar un gol de su equipo. Así era en cada pueblo, ciudad y barrio. Pero el problema seguía siendo el mismo: grandes grupos de personas, pasiones encontradas, alcohol y rivalidades. Los problemas iban en aumento, después de cada partido resultaban grandes números de heridos y problemas en los estadios, ya sea en la entrada previo al partido, durante el partido o en la salida al final del partido. La respuesta de las autoridades se reducía a control de multitudes.


Hasta entonces no existía mayor organización por parte de estos grupos, que se reunían de forma espontánea y cuyos encontronazos también eran espontáneos. Los problemas de violencia se fueron agravando nuevamente de acuerdo a los cambios socioeconómicos que se dieron ya para mediados de los setentas, siendo el principal de ellos la inmigración. Migrantes provenientes particularmente de Asia (India y Pakistán), del Caribe (Jamáica, Antigua, Bárbados) y de Irlanda empezaron a llegar a Inglaterra y empezaron a proveer a esta de mano de obra barata. Muchos ingleses perdieron su trabajo debido a las olas de migrantes dispuestos a trabajar por más tiempo y por menos dinero. Los primeros en ser despepdidos fueron por lo general los mayores, aquellos a quienes los contratos colectivos de los sindicatos estuvieron dispuestos a dejar afuera para cubrir los porcentajes consensuados de trabajadores nacionales. Fueron estos tipos que antes se juntaban los fines de semana con el resto para ir a desahogarse al estadio quienes ahora estaban toda la semana en el bar con ganas a desahogarse todos los días. Fue así como estos empezaron a organizar los grupos de aficionados que eventualemnte conformaron las firms o grupos de hooligans organizados e hicieron de la violencia del futbol un modus vivendi.

Fotos: canchito "fan" del Feyenoord de Rotterdam, Holanda; vergazos en Rusia; cobertura del diario sensacionalista The Sun sobre los disturbios de Millwall contra Birmighan City en el 2002 en los que 47 policías resultaron heridos: partido de copa inglesa entre Chelsea y Tottenham Hotspur en enero del 2007, la policía montada ocupó la gramilla de Stamford Bridge el estadio del Chelsea.

PD: Ya me piqué, los próximos posts siguen con el tema de los hooligans: cómo estos llegan a su máxima expresión en los ochentas, su impacto político, los noventas, la actualidad y su internacionalización.

PD2: Mañana abre el calzoncitos, barra show con todo y orden del quetzal.

PD3: La crisis internacional sigue y es tal que le pidieron a mi verdaero yo que escriba un par de chingaderas "serias" para medios "serios" válgame Dios, esta SÍ es crisis.

Wednesday, February 18, 2009

la sociedad de los graderíos


En un momento alguién dijo que la religión era el opio del pueblo, aquella herramienta que vos usas para controlar masas, pero hace poco alguién la dejó a un lado la religión y dijo que era el futbol el verdadero opio de las masas. El quién, cómo, cuándo y dónde, sinceremante no me importan. Pero como un fénomeno que debería ser exclusivamente deportivo y de entretenimiento, este ha llegado a tener un fuerte impacto social y político. ¿Pero y como carajos llegó esto a cobrar tanta importancia?

Date cuenta, vos que sos igual que yo, que amas este deporte, que te estuviste mordiendo las uñas desde el viernes pasado esperando ansioso el derby de la madonnina entre el Inter y el Milan y haces lo mismo con un Real - Barsa, un ManU - Liverpool, un Boca - River, un América - Chivas, un Rojos - Cremas incluso un Chameprico - Tiquisate, vos entendés no damos explicaciones, es algo que sentimos y no podemos hacer nada al respecto. Pero vos que no entendés y que vez esta cuestión con lógica y no te explicas por qu'e tanto drama, tanta ansiedad, tanto derroche de pasión. Es un partido de unos cincuenta que tu equipo juega durante el año y si ves otras cuatro ligas hablamos entonces de 250 partidos y si tenés 25 añitos y digamos te quedan cincuenta por vivir hacé las mates: son unos 12,500 partidos que tenés para ver como tu equipo gana, pierde o empata, esque puta mano, no te hagas un chongo por cada juego.


Pero así son las cosas y ahí tenés tu debate entre los apasionados y los que nada que ver, pero claro la cosa no es así en blanco y negro es compleja hasta la mierda. Tan compleja que existen académicos que estudian el movimiento de masas que genera el fut, tenés maestrías en universidades de prestigio y lamentablemnte tenés departamentos dentro de las fuerzas de seguridad también interesados en esto. La pasión por el futbol tiene sus variantes y va desde lo sano e inocente hasta lo intrinsicamente perverso y malvado. Aquí nos hechamos un repasito al aficionado, al hincha, al ultra y al hooligan.

Con que te guste el futbol, sos aficionado y se acabo. Claro podes ser de aquellos que le gusta más jugarlo que verlo o al revés, no importa si te gusta sos aficionado. El aficionado, sin embargo, lo vive con filosofía, inconscientemente toma en cuenta los numeritos de arriba, si lo ves bien y si no habrá otra oportunidad de ver tu equipo en el estadio pero igual no te importa verlo en la tele. Vas ves y lo comentas el lunes en tu trabajo o centro de estudios. Vas al estadio no tanto porque es un deber que tenes el de ir a apoyar a tu equipo sino por que es alegre. Gane o pierda tu equipo (a menos que sea una goleada o una derrota humillante) en el fondo te la gozaste. Te gusta pero tampoco es una parte importante de tu vida. Conoces a los jugadores que todos conocen y te recordas de aquellos partidos que realmente fueron memorables, pero no manejas estadísticas ni datos históricos, no te importa, lo dejas pasar. Gane, pierda o empate tu equipo vos seguis adelante, sin clavos. En este rubro podes meter a la gran mayoría de aficionados al futbol, la mara que durante el año sigue el deporte con la básico y que por las implicaciones de celebración y fiesta se mete de lleno cuando se vienen eventos como la Copa América, la Eurocopa y claro el Mundial: quinielas, escapadas de la oficina, pequeñas fiestas para ver un partido y no importa si es un Brasil - Francia o un Togo - Ucrania, la diversión viene antes. Sonreí al final es solo un juego.


Luego lo tenés al aficionado de corazón, el de toda la vida, el abonado, el tifoso, el fiel seguidor, el hincha. Básicamente es una persona que igual al aficionado normal pero que su felicidad se ve de cierta forma afectada por los resultados de su equipo. Es aquel que con orgullo ha vestido los colores de su equipo desde tiempos inmemorables. Los fines de semana están reservados para tu equipo y vivis cada segundo del partido con intensidad. Si tu equipo juega de local lo vas a ver pero estas dispuesto a quedarte en casa si sale a jugar de visitante. Si estas casad@ o vivis con tu novi@ entonces ya tenés cierto compromiso arreglado: si juegan de local los vas a ver y si salen te la llevas a ella o a él de paseo (que putas, no creyeron que esto sigue siendo exclusivo de los hombres). Si tenés bepis, olvidate, ahí van los regalitos: la pelotita tamaño 1, los zapatitos y el atuendo diminuto de tu equipo favorito. Delen vayan a buscar sus fotos de bepis, y allí rápido dan con que tipo de aficionado era tu papi o tu mami o ambos. Te llevas al nene o nena al estadio, con los colores claro, lo vestis de piez a cabeza, bufandas, gorros, lentes, lo que sea pero dejas muy pero muy en claro no solo el amor que tenés por tu equipo sino que también tu criatura es uno más, otro apoyo a la causa (¿cuál? ni puta idea, pero ese es el mensaje). Gritas los goles como cuando gritaste el nacimeinto de tu bepi, tu graduación, tu promoción en el chance o cuando tu enamorad@ te dio el sí. Lloras las derrotas como lo haces en funerales, cuando te quedaste sin chance y cuando tu pareja te dice que no te soporta más y te deja. Puteas cuando tu equipo la caga, igual que cuando te bocinan en el tráfico, cuando tu jefe te hecha el muerto por algo que no hiciste, cuando tu pareja gastó de más. La vida sigue eso lo sabés, pero tus ánimos son influenciados por tu equipo, ese que tanto querés.


Bajalé a los decibeles maestro. Aquí la cosa se empieza a complicar porque se camina en una delgada línea entre lo aceptable y lo inaceptable. El ultra. El futbol es tu vida. Tu equipo es tu religión. El estadio donde juega tu catedral y los jugadores y entrenadores tus dioses, santos, ángeles y arcángeles. No seguis a tu equipo porque te gusta, sino porque es tu obligación, es la razón por la cual estás en este mundo, tu razón de ser. Conoces a la plantilla completa del primer equipo y del segundo y también sabes quienes son los jugadores juveniles más destacados. No importan tus estudios o nivel de coeficiente intelectual, tenés una sabiduría enciclopédica sobre la historia, jugadores, entrenadores y partidos de tu equipo, todo en la punta de la lengua. Tu misión en el estadio es una y solamente una, alentar a tu equipo, darles ánimos para que salgan y den lo mejor de si. No vas al estadio a ver el partido sino que vas a apoyar, a alentar a hacer porras. Sos miembro de un grupo, los tuyos tienen un nombre y la directiva los reconoce como tales y te dan entradas a menor precio y te permiten entrar al estadio todo tipo de banderas, carteles, instrumentos musicales y vos aprovechas y colas bengalas. Tu lugar es por lo general la curva o los fondos, ahí sos parte de una colorida y bulliciosa porra que alienta a los suyos e insulta e intimida al rival. Sabes que el defensor central de tu equipo es de lo peor que hay, pero no lo puteas, lo ánimas le pedis que de lo mejor de si. Si tu equipo pierde lo perdonas y lo animás para la proxima si las cosas no funcionan tenés a dos que podes responsabilizar al entrenador o a la directiva. ¿La violencia? Reaccionas por la pasión, así como cuando te enojas y pateas una silla o le pegás a una pared. Una reacción violenta casi instintiva, igual reaccionas si te insultan en los graderios o en la calle, insultas de regreso y si suben los decibles podes llegar a los puños pero por lo general debido a la efervesencia del momento. Ya sea que jueguen en casa, de visitantes o hasta Timbuktú vos siempre estas con tu equipo. Tu primera, segunda y tercera prioridad es tu equipo de futbol y sus colores.

Así tenés combinaciones entre estos ya mencinados. Los aficionados que siguen al igual que los ultras al equipo pero que no lo viven con la misma pasión también se organizan y conforman lo que en España le llaman peñas y en Italia clubs. Así podes vivir fuera la ciudad o en otro país que el de tu equipo pero vos y otros lo siguen, se reunen en un bar, forman una peña o un club que por lo general los nombran con el nombre de algún gran ex jugador o con el nombre de tu ciudad o pueblo (e.g. Inter Club de Madrid, Peña Kempes Valencia de Santander, la juventud de Bobby Moore de Exeter, etc.), siguen fielmente al equipo, pero su vida y estado de ánimo no depende del rendimiento de este. Son hinchas que lo siguen como si fuesen ultras pero con la actitud de un aficionado.

Y luego caemos con el elemento más vil de las sociedades estas que se conforman en los graderíos de los estadios, el elemento violento, el hooligan pero para hablar de estos hay que dedicar un post aparte, quien sabe tal vez dos, por eso mejor respiro profundo y sigo después.

Fotos: La primera fue vilmente hueviada de jeisbuk con la complicidad de una mi sister; el resto fueron sacadas de google images, como la super mayoría de este bló.

PD: ¿Mister President y la foto con Fidel? Como que las disculpas no bastan pa´que lo reciban.

PD2: bello el clima de febrero ¿no? despeputado, me gusta :)


Sunday, February 15, 2009

besos, crisis, KISS, becks y ¿Anaconda?


Porque el amor es de todos los días, ¿querés más? pues mirá bien loco, ¡¡MIRÁ!!


demasiado cara la ropa interior por la crisis en Gual Strit


las falditas de las hermanas bien cortitas, todo culpa de la crisis, (buenas gambas sisters tururú)


KISS panda estail


Vení p´aka que te quiero mujer!!!!


Vení p´aka que quiero hacer más $$$$$$$


por darte un beso me detengo a como de lugar :)


bueno cabrón firmo lo que querrás pero dejá a mi mujer


la última evidencia de la evolución; japi berdey Darwin


KISS hogareño estail


¿por qué no pasó en la película? tal vez así la hubiera visto


KISS carnaval estail


lengüetazos (esque eran meros feyitos los modelos)


Vos Becks, aquí tod@s tus fans quieren que te quites los pantalones y mostres el panetone, pero yo quiero ver a Victoria. ¡¡VICTORIA, VICTORIA, VICTORIA!!!


pero quitate de ahí pendejo, que no la veo bien, ¡¡¡Epa!!!, no te enojes


Y recordate si las cosas están mal, podrían estar pior, así como la pobrecita Anaconda en esta otra fabulosa entrega de la gran diva: La Tigresa del Oriente, gggrrrrr
(luego de esto creo que definitivamente tengo futuro como cantante así que aguas Carlitos Peña)



PD: L´Inter ha vinto il derby della Madonina :)

PD2: Más sobre futbol hasta el miércoles, pero siempre despeputado.

PD3: Mister President, hay le encargo una fotita con autografo incluído de Fidel (si se puede con atuendo adidas celeste y blanco así para que se vea más chapina la cuestión)

PD4: Tristemente me informaron que la Anaconda murió de vergüenza luego del video :'(


Saturday, February 14, 2009

En el día del amor... un nuevo amanecer.


vos ves un par de buenas nalgas, yo veo un panetone en forma de corazón :)


hasta cuando no me aguanto las ganas y tengo que ir al baño, pienso en ellas :)


porque el amor no tiene edad y QUE TODOS LO SEPAN


piel de cocodrilo?, lágrimas de cocodrilo? andate al carajo, mejor amor de cocodrilo :)


delen chicos peluditos consiganse un cuarto o esperen que anochezca


dicen que lo lampiño esta sexy y de moda, pasame la shilét porfis


ooohhh soy el hombre más fuerte de gran bretaña, ssssiiii te quiero delegar mi ley


mi amor platónico les manda un besote a tod@s :)


con ella, rompé la alcanzilla


la osa no se aguanto más, queye un pokiko de amosh :)


y doña tigra siberiana al menos alguién que le de calorcito


con él... GRATIS :)


el amor es ciego y tampoco tiene cejas :O


-esta noche te haré mío y frotare petroleo caliente en tu decrepito cuerpo. -yes, yes, my darling!


la nena de abajo piensa: este ni a putas se convierte en principe azul, mejor besalo al Kontra


en Madrid dicen que Beckham tiene tan buen panetone...


... que hasta ellos se vuelven locos por su culito galáctico :O

Y así mientras tod@s se hacen una salsa y un queso por este día, yo digo basta y propongo un nuevo amanecer, que el amor sea celebrado cuando nazca y no cuando el calendario lo marque, dicho esto los dejo con la magnánima Tigresa del Oriente, tanta kalidá que no la invitan a los premios porque barre con todos, no solo por su música, sino por lo guapachosa que está.

Hoy a ellas un besote con mordidita incluída y a ellos una papa doble pero con mucho mucho amor de parte de todos mis yos.
eK, NF, RAW y esos otros que ni nombre les he dado :)





PD: ¿que querés más y que le suba los decibeles? Y bueno depende de vos y mañana tal vez se pone más candente la cosa.


Friday, February 13, 2009

Quo vadis, Baby?



El napuletano Gabi Salvatores (sí, ya sé, se llama Gabriele pero por aquí en el despepute le decimos Gabi) es conocido por haber ganado el premio Oscar a la mejor película extranjera por Mediterraneo en 1992. Desde entonces Gabi, ha filmado varias películas y fue hasta el 2003 que volvió con otra lica al ruedo de los festivales internacionales con Io non ho Paura (Yo no tengo miedo, que no se quien putas tradujo como El Pozo en algunos lugares aquí en latinoamerica). Ambas licas tratan temas completamente diferentes, Mediterraneo es sobre un grupo de reservistas militares italianos (por no decir aficionados a cuques) que durante la Segunda Guerra Mundial son enviados a una isla griega a "hechar ojo". Io non ho paura en cambio, trata sobre un niño en la campaña de Apulia que descubre a otro niño que ha sido secuestrado y por quien se pretende una fuerte recompensa. Dos historias diferentes pero con el personaje en común de los escenarios. En Mediterraneo, el sol y el mar mediterraneo juegan un papel fundamental al igual que en Io non ho Paura, lo hacen el sol y los campos meridionales. Al ver las licas una casi puede respirar sentir la brisa y respirar el fresco aire de ambos lugares. Pero Gabi Salvatores nos ha entregado mucho más aprte de estas dos joyas cinematográficas, pero no todo lo que toca es necesariamente oro.

En el 2005, Gabi presentó a las audiencias italianas y europeas la película Quo Vadis, Baby? La película narra la historia de Giorgia Cantini, una detective privada que trata principalmente casos de infidelidad matrimonial. Giorgia es una cuarentona soltera que vive sola y que tiene más rasgos masculinos que femeninos. Es una mujer amargada, de las que ven al mundo como una mierda en donde las pesadillas y no los sueños se hacen realidad. Ve su trabajo como una aventura, una chingadera y practica boxeo en su tiempo libre. A pesar de su pragmatismo e indiferencia, mantiene un misterioso atratcivo sexual que intriga a los hombres. Un día recibe unos videocassettes sobre su hermana que se había suicidado hace 16 años después de haber dejado su natal Boloña para buscar la fama tras las cámaras en Roma. Giorgia inicia a ver los videocassettes que son como un diario de su hermana Ada y poco a poco se le va metiendo en la cabeza de que la muerte de Ada no fue un suicidio y así inicia una obsesiva investigación.



De primas a primeras, y después de haberles hablado bien de Mediterraneo y de Io non ho Paura, podría, como la hicieron la mayoría de críticos, hacer mierda a la película. ¿Por qué? Pues porque no es lo que muchos esperaban de Gabi, confieso que a mi también me tomo desprevenido. El ritmo de la película es deprimente sin lugar para la acción. El suspenso es tan sutil que raya en el aburrimiento y si te perdés un diálogo fácil podes perder el interés por toda la lica, cabecear y luego roncar. Al igual que en su mayoría de licas Boloña también tiene su rol protagónico pero no es la Boloña intelectual y jóven de techos rojos que vemos, sino una Boloña más decadente, gris y lluviosa. Ciudades industriales como Pittsburgh o Glasgow pasan por alegres porristas de colegio a la par de esta Boloña.

Dicho esto podemos dejar la película ahí, ponerla frente al paredón, cargar, apuntar y ¡fuego¡ Olvídate del Quo vadis mejor dejalá en Hasta la vista, Baby.

Pero no.


Aquí en el despepute vemos la película desde otra tónica, desde un punto de vista distinto al de la demás mara. El dato más relevante es que de acuerdo a diferentes asociaciones del cine italiano como ANICA, API y AGIS (productores, distribuidores), Quo Vadis, Baby? fue un éxito en las grandes ciudades italianas industriales del norte como Milano, Turín, Bergamo y Brescia por mencionar unas. Aquí en el despepute nos parece que los televidentes de estas ciudades se idenificaron no con la historia sino con los protagonistas. Personajes que representan hombres y mujeres que están en la mitad de sus vidas, todavía guardan cierta energía juvenil pero ya muy viejos como para andar corriendo de arriba para abajo; solteros, con trabajos que no son del todo de su agrado, envueltos ya en la misma rutina y en busca de algo diferente que les de nuevos aires y le agregue un poco de sazón a sus vidas. Le criticaron a Gabi darle el rol protagonista de Giorgia a Angela Baraldi, una actriz desconocida que solo había figurado en programas de televisión y un corto y de quien nadie sabía ni pío, nadie excepto Gabi. Pero eso fue el objetivo, no era una actriz de gran trayectoria, una Victoria Abril, una Cecilia Roth, una Julianne Moore que la ves, hace un gran papel, pero es antes la Abril, la Roth, la Moore y después Giorgia. Con Angela Baraldi vos ves a Girorgia y al verla ves tu vida retratada en estas grandes ciudades, grises, lluviosas, decadentes y te preguntas ¿cómo carajos llegue a esto? y luego te das cuenta que no es tarde, que todavía te queda energía pero depende de ti, vivir en el pasado y aferrarte a esos fantasmas como lo hace Giorgia o levantarte y pensar como serán tus días a partir de mañana.

Desconocemos si ese fue tu proposito Gabi, pero nosotros aquí, así lo vimos.

Fotos: cortesía gugul: Afiche para la tele italiana, Gabi Salvatores, afiche original de cine.

PD: Porque escribí en plural? Ni puta idea, se me cruzan todos mis yos de vez en cuando, pero sigo siendo yo, no, no aquel yo, sino yo mismo... ya me hice bolas, donde putas dejé el sukrol?

PD2: La peli la descargan como siempre en torrentz, yo conseguí la versión in espanish, si bien estoy más ocupado de la cuenta, cualqueira siéntase libre de mandar un emilio si no tienen ni puta idea o mucha hueva como para bajarla. Eso sí paciencia, que tarde o temprano contesto.

PD3: ¡¡¡¡¡SOLTER@S UNITE!!!!!

Sos de los que los 14 del febrero haces que tenes piel de cocodrilo pero realmente por dentro se te salen lágrimas de cocodrilo. Cupidos, corazones y rosas rojas por doquier, no salis porque las calles, los centros comerciales y los restaurantes están abarrotados de enamorados y vos estas sol@. No podes ir a la bar, ni a la tienda, ni a la disco, ni a ver a la abuelita porque no querés que te vean sol@ ¿¿¿???

Pues aquí en el despepute decimos A LA MIERDA CON ESTO y así vilemnte nos cagamos en la celebración artificial del amor del 14 de febrero y yo (si yo ese el de la foto del título, en el fondo) reclamo el uso inadecuado de mi número favorito (jugué fut siempre con la 14 en la espalda) y reclamo el uso de este mes en el que fui parido para semejante truculenta celebración que más que enamorados hace sentir mal a la mara soltera y otro montón los deja bien pizados económicamente y por ello les ofrezco un buen panetone (por no decir nalgas) y un "nuevo amanecer". Tod@s invitad@s mañana por la tarde (pues, demen chance que se me quite la goma ¿dónde carajos ta mi vat 69 y la coca cola?).