¡Kontra la hegemonía!

En medio de la polémica ley sobre las motocicletas, curiosamente ayer matan a tres personas unos sicarios en moto.

Las teorías de conspiración francamente me la pelan, tienen que existir datos contundentes o al menos evidencias tangibles como para decir que ahí hay gato encerrado, de lo contrario "la teoría" queda en un debate similar al de quien fue mejor Pelé o Maradona. El juego de poder político, sin embargo, ha dado claras señales de procurar funcionar en beneficio de unos a expensas de otros. La noción liberal clásica de que este sea un juego de suma positiva nunca ha logrado solidificarse dentro de una nación o régimen internacional, la noción realista de que es un juego de suma cero en la que uno gana y el otro pierde prevalece. El objetivo de aquellos que ostentan el poder político y económico ha sido, es y seguirá siendo (así lo veo yo al menos) mantener el status quo. Por esto me refiero a mantener un sistema que los beneficie tanto en el corto como en el mediano plazo (en el caso de Guatemala esto se ve claramente con la élite económica del país en el largo plazo y los gobiernos de turno en el corto).

Marx y Engels en su momento argumentaron que el mantenimiento de dicho status quo se da por medio de la coerción estatal. Reconocemos claro que es en el estado en donde se monopoliza el poder, para eso existe, para eso se organizó la gente, para que este pueda velar por valores como la seguridad, la libertad, el orden, la justicia y el bienestar. Carlos y Federico reconocían entonces que es a tráves del estado y su monopolio del poder que las cúpulas políticas y económicas mantienen un sistema que los favorece, mantienen el status quo. Es hasta mediados de la década de los treinta del siglo pasado que dicha noción es ampliada por quien sin duda es una de las mentes más brillantes del pensamiento político del siglo pasado: Antonio Gramsci.

Gramsci, paso los últimos once años de su vida siendo torturado y humillado en una bartolina por ser miembro del partido comunista y oponerse a la oprobiosa dictadura de Benito Mussolini. Sin acceso a libros y con grandes dificultades, logró escribir varios "apuntes" conocidos hoy como sus libretas de prisión en donde toca temas de teoría política, economía, filosofía, historia y crítica literaria.

El aporte más importante y su crítica más fuerte es su postura contra la hegemonía (en ese entonces aquella del partido fascista del Duce). Gramsci, al contrario de Marx y Engels, argumenta que el status quo se mantiene no solo por la coerción sino también por el consenso. O sea, se crea lo que vamos a llamar un discurso hegemónico que junto a la coerción logran enraízar un sistema oligárquico o dictatorial en todos los niveles de la sociedad a tal punto que esta lo considera normal y por lo tanto no decide rebelarse contra el mismo. Magistralmente Gramsci compara este discurso hegemónico a la visión de poder de Nicolás Maquiavelo como un centauro: mitad humano, mitad bestia = mitad coerción, mitad consenso. Para Gramsci el estado no es exclusivamente una "maquina para la opresión de una clase por otra" como afirmaba Engels, sino que aquel va más allá y define consenso como la creación y recreación de la hegemonía de las cupulas de poder en la sociedad.

El discurso hegemónico se diluye en la sociedad a tráves de la sociedad civil y sus herramientas son las artes y los medios de comunicación, como una propaganda indirecta. Este discurso logra que los valores políticos, morales y culturales de las élites en el poder sean universalmente aceptados por grupos o sociedades subordinados como propios. Así se consolida el status quo. Por ejemplo, la "mano invisible" de Adam Smith (a quien hay que recordarle a todos los economistas neoclásicos y monetaristas que NO, repito, NO era un economista sino un filósofo moral) aplicada al capitalismo actual no funciona exclusivamente según las leyes de oferta y demanda atadas al fenómeno de escasez de bienes. El sistema capitalista actual funciona gracias al discurso hegemónico y a lo que Emanuel Wallerstein llama "las contradicciones del sistema".

Se nos bombardea día y noche con imágenes, mensajes, sonidos, discursos, artículos y comunicados de prensa, canciones, películas, documentales, noticias, blogs, foros, etc. con un modelo tanto positivo (como son las cosas) y normativo (como deberían ser las cosas), no hay opción o se es y se aspira a ser o uno no es parte del sistema, uno es marginado, se convierte en un paria. La identidad del individuo se trastorna a tal punto hasta convertirlo en uno más del grupo, de la masa, de los borregos. Un grupo que inclina la cabeza y sigue ordenadito en fila recibiendo y aguantando todo lo que venga del estracto dominante de la sociedad. Luego viene el asunto de las contradicciones, ese que es el gran truco de magia del sistema y del cual no nos percatamos a pesar de ser los protagonistas del mismo. La contradicción descansa en como la clase trabajadora es explotada para producir por la clase dirigente, pero paralelamente es la clase trabajadora la que consume el fruto de su trabajo, si no, no hay negocio.

Llevamos más de tres siglos y medio de estar en las mismas. El status quo prevalece y uno espera que hayan "autoridades" que resuelvan el asunto. Nadie se da cuenta que dichas "autoridades" son pilas pero para darnos atol con el dedo y en fila vamos uno por uno con la bocota abierta. Insisto en que las cosas no son como nos las pintan "las crisis" ¿por qué es que unos pocos se benefician de estas? y más preocupante aún ¿por qué es que los que se benefician son siempre los mismos? No se ahueven, yo voy en la fila también, aunque tomando nota.

Curiosamente ayer matan a tres personas unos sicarios en moto. Perdón, quise decir "Kuriosamente". El chavito en la foto me gustaría ser... sigo soñando.

Los dejo con uno de los mejores críos de Maxi Jazz, Sister Bliss y Rollo conocidos como Faithless. Traducción (solo coros) despeputada.

Sea un arma de largo alcance o un suicida con bombas
La mente perversa es un arma de destrucción masiva
Sea Notisiete o CNN
La desinformación es un arma de destrucción masiva
Sea caucásico o asiático
El racismo es un arma de destrucción masiva
Sea la inflación o la globalización
El miedo es un arma de destrucción masiva

Sea Halliburton, Enron o cualquier otro
La avaricia es un arma de destrucción masiva

Debemos encontrar el coraje e imponernos
LA INACCIÓN ES UN ARMA DE DESTRUCCIÓN MASIVA




LA INACCIÓN ES UN ARMA DE DESTRUCCIÓN MASIVA






LA INACCIÓN ES UN ARMA DE DESTRUCCIÓN MASIVA

PD: Hay nos Chuck Norris al ratón.